lunes, 26 de julio de 2010

NARA: APOGEO DEL IMPERIO



Sábado 17 de Julio de 2010

Nara

Día 46

EL VIAJE INTERIOR

Nara se encuentra a tan sólo 50 minutos en un tran de cercanías de Kyoto. Precisamente ahora se cumplen 1300 años de su declaración como capital del imperio, honor que precisamente cedió a la mencionada de Kyoto.

La primera sorpresa al salir de la estación es el ecuentro con los animaes sagrados de Nara: los ciervos. Pululan por doquier. Parecen estar acostumbrados a convivir con el hombre. Lo llean haciendo por lo menos esos 1300 años. No obstante, hay carteles adviertiendo que son lo que son animales, y pueden comprotarse como tales: patalear, morder o incluso cornear. El tiempo me hace ver que quizás no sea exagerado. Los ciervos están muy acostumbrados a que los alimenten, y si “detectan” comida (incluso aunque sea en forma de plano de la ciudad, o papeles) no esperan pacientemente a que se lo ofrezcas, dan el primer, y el segundo y hasta una carrera para alcanzarlo. Perdieron la timidez.

Tras un pequeño paseeo llegó al primero de los templos. Es el templo Kofuku-ji, junto al que se encuentra la pagoda de 5 plantas, que pese a haber ardido completamente 5 veces, data de 1426. Claro que el templo original fue fundado en 669, y llegó a tener 175 edificios, de los que hoy en día sólo quedan unos pocos.

A continuación me dirigo a otro destino, quizás relegado ante el tamaño de los vecinos, pero que para mí no les desmerece. Me refiero al jardín Isuie-en.

El jardín se encuentra rodeado por el templo de Todai-ji, y por las montañas Wakabusa y Kasuga, que son un marco perfecto para enmarcar este maravilloso rincón de Japón. Aflora mi debilidad por estos espacios y seguramente mi descripción no sea del todo equilibrada, ni objetiva. Voy a descubrirme: es probablemente la imagen que más tiempo perdurará en mi mente de todo lo que he visto en Japón. Le dediqué, o más bien disfrute, durante un par de horas. Incluso improvisé un plano a mano para hacerlo más mío, y poder recrear las fotos en su situación en el futuro.

Ya desde la entrada notas la delicadeza y los detalles. La puerta, su cubertura, que se repite en todo el vallado de piedra, la casa de venta de billetes y una vez dentro, el primer jardín. Pequeño, pero ya impresionante. La guía dice que hay visitarlo en primavera, cuando florecen todas sus flores, o en otoño cuando cean las hojas. ¡No lo sé! Ya me parece maravilloso en verano. Sus pinos, el estanque, el rumor del río que lo rodea (y del que toma y al que retorna todo el agua del jardín, ¡qué ecológico!), sus puentes y al fondo la casa de té.Dicen que en ella se reune la asociación que intenta preservar la pureza del rito de la ceremonia del té. Les alabo el gusto.

Cuando estoy en una especie de abducción de belleza, de repente, más allá de la casa de té, y cuando creía que había visto lo mejor, me encuentro con el jardín trasero. Y realmente, me siento impresionado. Otro lago, cascadas, islas elevadas, un molino, zonas para descansar o leer, comedores, mas puentes: belleza. Gracias al excelente folleto puedo apreciar el efecto del juego de las plantas, de las elevaciones, de los esanques.

Salgo del jardín entre nubes. Afortunadamente, me quedarán las fotos, mi plano, el folleto, y por que no volver algún día …

El siguiente templo es el plato fuerte de Nara, es el templo de Todai-ji. A pesar de que el templo ha ardido 2 veces en 1180 y 1567 y, que la actual reconstrucción data de la época Edo (1615 a 1867, y en concreto de 1709) y es un tercio de la original, sigue siendo la estructura de madera más grande del mundo. Y como pueden atestiguar las fotos, realmente lo parece, además de serlo. En su interior el Buda Vairocana, de 16 metros de altura, que ha sufrido, además de los incendios del edificio, varios terremotos que han quebrado su cabeza varias veces, datando la actual del año 1692. Las dos figuras que lo escoltan a derecha e izquierda datan de 1709.

Después de la impresión de ver lo que se puede lograr con la madera (lo que me recuerda que en mis lejanos tiempos de estudiante de ingeniería nos decían que a igualdad de peso, la madera es más resistente que el acero: ¡cuánto tenemos que aprender de la naturaleza) me dirijo a otros destinos.

En este caso me acerco a uno de los templos de la religión sintoista: el Kasuga Grand Shrine. El edificio original data de 710, pero de acuerdo con las creencias sintoístas fue demolido y reconstruído cada aproximadamente cada 20 años, hasta un total de más de 50 veces. El actual data de 1863. Contiene más de 3000 linternas de bronce y piedra, que producen un espectáculo impresionante cuando son encendidas en contadas ocasiones a lo largo del año.

Desgraciadamente la lluvia me impide acercarme a ver el templo Moryu-ji, donde está la construcción de madera más antigüa del mundo, fechada en el siglo VII.

En definitiva una visita que resulta verdaderamente impresionante y única.

FRASE DEL DIA

De un nuevo libro, del autor Luis rojas Marcos: La fuerza del optmimismo un par de ellas:

“El firmamento no es menos azul porque las nubes nos lo oculten o los ciegos no lo vean”

“Mi vida no tiene propósio, ni dirección, ni finalidad, ni significado, y a pesar de todo soy feliz. No lo puedo comprender. ¿Qué estaré haciendo bien?

ANÉCDOTA

En el templo Todai-ji detrás del Buda, una de las columnas, tiene en la base un hueco pasante pero minúsculo. La tradición dicta que quién lo atraviese de lado a lado, alcanzará el nirvana. Durante mi visita, fui testigo de cómo un chico francés, bastante alto, lo conseguía. ¡Qué lo dsifrute!

CANCIÓN

Os adjunto un video de música “tradicional japonesa” que presencié en directo.

2 comentarios:

  1. Veo que Japón está siendo una inagotable fuente de inspiración. Cuando ya creíamos haber terminado la fase nipona, nos deleitas con esta descripción de jardines y templos que me han provocado alguna que otra pérdida salivar.

    Ni que decir tiene que la "música folklórica" me ha sorprendido. Las vueltas de la pareja que baila a la izquierda de la imagen son dadas con tanta sensualidad que ni tan siquiera los caribeños hubiesen podido superarlo, y por supuesto, ni nuestro Chema de las mejores ocasiones.

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  2. Luis,

    Pues aun queda un capitulo en Tokio ...

    Lo del floklore es gracioso. Creo que es el segundo video de actuaciones de musica latina del que fui testigo. El otro fue en San Francisco. Esto es una invasión, o es que vuelve la pasión por el baile.

    Creo que es un debate interesante para nuestro veranillo de San Miguel ... que se acerca irremediablemente.


    Saludos

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